Ella, con su vestido largo rojo color pasión, sus tacones altos, su reloj de oro, u collar de plata, ahí esta, bajando esas escaleras de caracol, con gesto de poderío se apoyó en la barandilla de las escaleras, se sentía importante. A mitad de escaleras, se paró. Saco un paquete de cigarrillos de menta, encendió uno. Siguió bajando escaleras hasta que se acabasen, cuando las escaleras se acabaron, se paró y echo su largo y rubio cabello hacia atrás. Giro sobre el pasillo de la derecha y siguió recto. Siguió caminando con su cigarrillo echando humo,el filtro del cigarrillo lo había dejado rojo por su pintalabios. Se metió en la segunda puerta a la izquierda. Una habitación amplia con una cama, una bota de champán y dos copas. Abrió la botella de champán. Ella llevaba más de dos horas esperándole, muerta de ira, dejo la copa caer, el ruido que hizo le hacia contener más ira. Tiro al suelo su cigarrillo y lo apagó con el fino tacón.